17.08.2015
Una Cineteca PUCV colmada de público que llegó hasta nuestra Casa de Estudios para interiorizarse de los pormenores de la primera película del cineasta Raúl Ruiz rodada fuera de Chile: “Diálogo de Exiliados”, marcó el inicio del ciclo “Making Of: Trabajar con Raúl Ruiz”.
Entre los asistentes estuvo el director del Instituto de Arte de la PUCV, Bruno Cuneo; la directora artística y productora ejecutiva del ciclo, Chamila Rodríguez; y el actor Sergio Hernández, quien presentó el filme. Dentro del público asistente se encontraba el actor Francisco Reyes, entre otras personalidades del mundo de la cultura regional.
El actor Sergio Hernández compartió con los asistentes y se refirió a algunos aspectos de la cinematografía de quien es el director chileno más relevante de la historia del cine contemporáneo.
Hernández ha producido teatro y televisión tanto en Chile como en el extranjero. Ha participado en algunas de las películas más importantes del cine nacional, entre ellas: “La Frontera” de Ricardo Larraín; “Johnny Cien Pesos” de Gustavo Graef-Marino; “Be-Happy” de Gonzalo Justiniano; “Dawson: Isla 10” de Miguel Littin; “La Sagrada Familia” y “Gloria”, ambas de Sebastián Lelio, entre muchas otras.
“Agradezco la invitación del Instituto de Arte y de la Unidad de Extensión Cultural de la PUCV. Son tan raros los espacios que se abren para presentar a los grandes artistas y creadores de nuestro país. En ese sentido, en los años 60 en Chile y en otros países latinoamericanos, uno tenía la posibilidad de ver filmes de Paraguay, Bolivia, Argentina, Brasil y Perú, lo que hoy en ningún país es posible. La cartelera está dominada por distribuidoras cinematográficas que funcionan a partir del negocio”, precisó el actor.
En la oportunidad, el actor también leyó un texto de Raúl Ruiz que explica -en parte- la estética que dominan sus películas: “Todo film conlleva siempre otro film secreto y para descubrirlo basta desarrollar el don de la doble visión, que consiste en ver en una cinta no ya la secuencia narrativa que se da a ver efectivamente, sino el potencial simbólico y narrativo de las imágenes y de los sonidos aislados del contexto”.
LOS CINCO SENTIDOS DE RAÚL RUIZ
Hernández dio a conocer los cinco rasgos que se aprecian en la corriente cinematográfica de Raúl Ruiz, lo que los especialistas han denominado los cinco sentidos del director:
1) El sentido de la paradoja: “la inteligencia era inseparable del humor, la talla chilena como corte y perspectiva humorística sui generis que es parte de nuestro deporte de llevar la contra”.
2) El sentido de la digresión: “su habilidad para deambular de un lugar a otro en medio de un cúmulo de referencias infinitas y completamente eclécticas, de la teoría cuántica a un clásico del cine B, donde se reconoce su temple lúdico e insubordinado”.
3) El sentido del trabajo: “Ruiz era un trabajador empedernido. No había día sin que inventara algo o preparara un proyecto siguiendo los dictados de su imaginación hasta el final sin que nada ni nadie pudiera detenerlo. El trabajo en equipo lo transformaba en una actividad a la vez intensa y amable, vehemente y benévola, aplicando las formas de ingenio y los modos de seducción propios de un profesional capaz de transformar toda limitación en virtud y de convencer al resto para que lo siguieran en sus travesuras”.
4) El sentido de la ficción: “su facultad metafísica de tomar teorías y narraciones de todo tipo: del pensamiento de la infancia al imaginario de la ciencia contemporánea, de las formas poéticas a las historias de la novela y proyectarlas hasta construir mundos peligrosamente habitables dadas las paradojas internas. Se aproximaba al trabajo artístico con la voluntad de representarse nuevos mundos (…) Es lo que entendía por misterio del arte, lo que oponía al ministerio de las academias, los lugares comunes aceptados”.
5) El sentido del universo cinematográfico: “las infinitas posibilidades de representación que se pueden extraer de las operaciones discretas del lenguaje del cine es lo que le permitió de manera lúdica y subversiva poner todos los rasgos enumerados al servicio de la configuración de un universo de imágenes y sonidos sui generis, donde cohabitan más de 100 mundos posibles formados por cada una de sus películas, todas muy diferentes y con un aire de familia”, concluyó.
Por Juan Paulo Roldán
Dirección General de Vinculación con el Medio
