Con la clase magistral "Hoja de ruta: La crisis como oportunidad. Una mirada empresarial", dictada por Bernardo Larraín Matte, presidente de la Sociedad de Fomento Fabril (SOFOFA), se dio inicio a las actividades 2020 del MBA PUCV, correspondientes a la séptima versión ininterrumpida del programa de postgrado en la ciudad de Santiago.

En la actividad -que debido a la actual situación se realizó de manera virtual-, participaron el rector de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, Claudio Elórtegui Raffo; el director de la Escuela de Negocios y Economía, Eduardo Cartagena Novoa, miembros del comité académico del MBA PUCV, académicos y estudiantes del programa, entre otros.

En la oportunidad, el Rector de la PUCV agradeció la participación de los asistentes, dio un especial saludo a los estudiantes del MBA y destacó la labor y el aporte de Bernardo Larraín en momentos tan decisivos como el que estamos viviendo.

Claudio Elórtegui Raffo felicitó a los directores del MBA PUCV Y ENE PUCV -Orlando De la Vega Luna y Eduardo Cartagena Novoa- por la consolidación del programa de magíster en Valparaíso y Santiago. Enfatizó que "para avanzar en beneficios sociales, se requiere recuperar mayores tasas de crecimiento económico", mencionando esto a raíz de lo poco que se habla de Economía en el contexto de cambio social que experimenta actualmente nuestro país.

Por su parte, el director de la Escuela de Negocios y Economía, Eduardo Cartagena, se refirió a la consolidación del MBA PUCV al dictarse por séptimo año consecutivo en Santiago.

Orlando De la Vega, director de Postgrados de ENE PUCV, dio la bienvenida a los estudiantes del MBA y manifestó "estar trabajando arduamente para entregar el mejor servicio académico".

HOJA DE RUTA FRENTE A LA CRISIS

En su exposición, Bernardo Larraín, quien antes de iniciar su presentación destacó el hecho de continuar con el programa de magíster (que por el momento se dicta en formato online) pese a la actual pandemia que afecta a nuestro país y el mundo, se refirió a los avances en temas de desarrollo y crecimiento durante las últimas tres décadas en Chile, haciendo hincapié en que luego de los primeros 15 años "se comenzó a perder el impulso reformador".

El líder gremial sentenció que la política perdió ambición reformista y la capacidad de construir acuerdos, así como también lo hicieron las empresas; agregó que "quizá no fuimos lo suficientemente proactivos para que crecieran nuestras culturas empresariales y nuestra confianza". Complementó esta idea, señalando que "la cultura organizacional debe estar viva pues se trata del principal antídoto contra las malas prácticas".

Continuó su análisis indicando que, a raíz de lo anterior, y a que representantes políticos cometieron el error de ofrecer soluciones simples a problemas complejos, los ciudadanos "se indignaron con razón" frente a fallas que se hicieron evidentes e insoportables.

El expositor se refirió a la hoja de ruta que es necesario proponer a futuro, para gestionar el capital de confianza, mejorar expectativas de empleabilidad de jóvenes, mujeres y personas en situación de discapacidad; así como también recuperar la actividad económica, asunto que recalcó, es muy relevante.

Según Larraín, el proceso constituyente va de la mano con la planificación que es necesaria para mejorar la situación actual, y es por ello que se refirió a la importancia de la participación de muchos actores. Sin embargo, enfatizó que "este proceso no resolverá por sí solo todos los problemas", por lo que resulta relevante que no se creen expectativas desmedidas.

Por último, realizó un llamado a activarse en este importante e histórico proceso, pues se trata de una oportunidad que pocas veces se presenta.

En la ocasión, también participó el Padre Enrique Opaso Valdivieso, quien dio las palabras finales, junto a una reflexión sobre la temática de la clase magistral y los tiempos actuales.

Por María José Ekdahl Marambio

Periodista

Escuela de Negocios y Economía PUCV