
Con la entrega de una imagen de la Sagrada Familia, Fundación Las Rosas distinguió a los más de 200 estudiantes de la Escuela de Ingeniería Industrial de nuestra casa de estudios que coordinaron operacional y logísticamente la última Colecta Nacional en Valparaíso y Viña del Mar. En la oportunidad se reconoció la histórica relación entre esta Unidad Académica y la Fundación, que se remonta al año 2017, ocasión en la que por primera vez las y los estudiantes de Ingeniería Civil Industrial de la PUCV participaron y organizaron este evento.
Claudia Bustos, jefa regional de Fundación Las Rosas, señaló que “para nosotros, construir comunidad significa también generar alianzas que multiplican el cuidado. Por eso queremos destacar la corresponsabilidad social y compromiso solidario de la Escuela de Ingeniería Industrial de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso por haber hecho de la solidaridad un sello formativo en los futuros profesionales que educan, convirtiéndolos en embajadores del cuidado y la esperanza”.
Cabe destacar que el vínculo entre ambas entidades se ha extendido más allá de los voluntarios de la colecta y ya casi por 10 años. Anualmente, un grupo de estudiantes aplica conocimientos de organización y planificación, propios de la ingeniería industrial, para coordinar a la fuerza de voluntarios que recorren el Gran Valparaíso. Por otra parte, los futuros ingenieros civiles industriales han realizado prácticas en la Fundación, así como otros han desarrollado sus trabajos de finalización en la misma institución.
La distinción fue recibida por Pamela Wilson, jefa de Docencia de la Escuela de Ingeniería Industrial, en representación de los estudiantes, y fue entregada por Claudia Bustos; Gustavo Alcalde, miembro del directorio; Carlos Irarrázaval, presbítero y capellán; y Elizabeth Frese, miembro del consejo regional de la Región Valparaíso, todos de la Fundación Las Rosas
Esta distinción se d en el marco del Desayuno Fraterno 2025, ocasión en que la institución, en el marco de la actividad más importante del año, agradece al empresariado, instituciones, academia y a la sociedad civil por su colaboración y da su cuenta pública. Cabe destacar que es primera vez que se distingue a una institución de educación superior con imagen de la Sagrada Familia.
Por Valeria Andrade
Escuela de Ingeniería Industrial