Esta semana se realizó en la Casa Central de la PUCV, la ceremonia de celebración de los 30 años de historia del Doctorado en Lingüística del Instituto de Literatura y Ciencias del Lenguaje (ILCL) de nuestra Universidad, uno de los con mayor trayectoria a nivel nacional.
En la ocasión, asistieron el rector, Nelson Vásquez; la vicerrectora Académica, Claudia Mejías; junto a ex rectores de la PUCV, autoridades universitarias, alumnos y graduados del programa, acompañados además de profesores y la comunidad del ILCL.
El rector destacó el buen ejemplo que ha significado la exitosa carrera del doctorado para el resto de los programas de la Universidad, enfatizando en algunos atributos centrales como el diálogo intergeneracional, las redes nacionales e internacionales que se han creado a lo largo de los años, el reconocimiento al trabajo de los estudiantes en la generación de conocimiento y un sentido de misión, acompañados de “dedicación, tiempo, convicciones, junto con un foco y visión clara”, añadió.
Junto a ello, celebró el recorrido y reconocimiento realizado en la ceremonia a los fundadores del programa y de quienes han contribuido al desarrollo y posicionamiento del doctorado, así como la mirada al futuro que se ha planteado este postgrado.
En sus palabras, el rector los instó a seguir construyendo una comunidad científica, continuar siendo un programa de excelencia, fortalecer las redes nacionales e internacionales, así como mantener el compromiso a la construcción del ILCL, tarea que requiere el esfuerzo continuo de sus directores y la comunidad que les acompaña.
Finalizó sus palabras destacando que “no se olviden de las personas, de los estudiantes y sobre todo de los del sistema escolar. Una lingüística tiene sentido y todo este desarrollo tiene sentido si tiene valor de uso y uno de los usos más importantes en la actualidad se da en los colegios”.
UNA TRAYECTORIA EXITOSA
El actual director del programa, Romualdo Ibáñez realizó un recorrido por la historia que llevó a la creación de este espacio formativo e investigativo, destacando la labor de los profesores Marianne Peronard Thierry y Luis Gómez Macker, quienes en 1982 tuvieron la visionaria idea de crear el Magíster en Lingüística Aplicada y tras 11 años de una exitosa experiencia, decidieron ampliar el estudio de las ciencias del lenguaje al más alto nivel, creando así el Doctorado en Lingüística en 1993.
Del mismo modo, se destacó la labor del académico del ILCL, Giovanni Parodi, quien fue director del programa desde 1998 hasta el 2018, quien “impulsó incansablemente el desarrollo del Doctorado, así como su visibilización e internacionalización”, expresó Ibáñez, sumando que la energía y entusiasmo de Parodi les permitió adjudicarse diversos proyectos de mejora y enfrentar exitosamente todos los procesos de acreditación que ha tenido el programa entre 1994 y 2020, logrando 7 años de acreditación consecutivamente en sus últimas evaluaciones.
Junto a ello, el director del programa relevó los reconocimientos que han recibido sus estudiantes, donde instituciones externas han valorado el aporte realizado por cada tesis en el avance y desarrollo de las ciencias del lenguaje. Entre ellos, la Academia Chilena de la Lengua, el año 2000 distinguió a Giovanni Parodi, en 2002 a Pedro Santander, en 2012 a Gina Burdiles y en el año 2021 a Eugenia Rivieri, esto sumado a la distinción de la Asociación Latinoamericana de Estudios del Discurso (ALED) en 2023 a Alejandra Figueroa.
En esta misma línea, el doctorado fue galardonado en 2022 con el premio a la excelencia académica por la Asociación Universitaria Iberoamericana de Postgrado (AUIP), logrando consolidar su liderazgo en el área disciplinar dentro de Latinoamérica, junto con los logros de la Revista Signos y los trabajos realizados por la Cátedra UNESCO para la Lectura y Escritura.
El Dr. Ibáñez concluyó comentando que “más que conformarnos con estos reconocimientos, nos sentimos obligados a preguntarnos hacia dónde debemos mirar, pues aún queda mucho camino por recorrer, aprender y mejorar”.
Como próximas metas se propuso sistematizar la vinculación decidida con otras instituciones nacionales e internacionales para trabajar de manera cooperativa, así como avanzar en la investigación interdisciplinaria, continuar avanzando en el desarrollo de la disciplina a través de la incorporación de nuevas líneas de investigación apoyadas por nuevas tecnologías.
“Creo que nuestros retos apuntan a consolidar el liderazgo y la proyección internacional, mediante el mejoramiento de nuestros indicadores de eficiencia y prácticas de autoevaluación y del posicionamiento como centro de generación de conocimiento de vanguardia en Latinoamérica” finalizó Ibáñez.
Por Gabriel Cerda
ILCL
