En una tradicional ceremonia que se desarrolló en el Salón de Honor de la Casa Central, la PUCV confirió el grado de Profesor Emérito, la más alta distinción que entrega la Universidad, al Dr. Kamel Harire Seda, académico de la Facultad Eclesiástica de Teología como reconocimiento y gratitud por su larga, destacada y fructífera trayectoria.
El Doctor en Teología de la Universidad de Navarra ha estado vinculado con la PUCV por más de 50 años y ha ocupado diversos cargos: director del Instituto de Ciencias Religiosas y posteriormente primer decano de la Facultad Eclesiástica de Teología; director general estudiantil, jefe de gabinete de Rectoría, presidente del Capítulo Académico y Consejero Superior designado por el Pro Gran Canciller de la Universidad; como también destaca su rol en la Comisión de Participación y Democracia.
El discurso de Laudatio fue realizado por el director del Instituto de Ciencias Religiosas, Dr. Francisco Vargas, quien destacó las condiciones de liderazgo del profesor, ser un reflejo de los valores de la Universidad y es un maestro que predica con su ejemplo.
“El profesor Harire tiene además la sencillez propia de las personas que saben que todos estamos peregrinando en un mismo camino. Ha sabido ser cercano a todos, desde las más altas autoridades universitarias hasta quienes cumplen las funciones más sencillas en nuestra Universidad. Es una persona querida y reconocida transversalmente”, complementó.
La ceremonia fue presidida por el Obispo de Valparaíso y Gran Canciller de la Universidad, Monseñor Jorge Patricio Vega Velasco y por el rector Nelson Vásquez Lara.
PROFESOR HARIRE: “EL MÉRITO RADICA EN QUIÉN LO OTORGA”
Sobre este importante reconocimiento otorgado por los profesores de la Universidad, el Dr. Harire señaló que “el mérito no radica en quien lo recibe, sino en quien lo otorga. Este es un gesto de generosidad, de vencimiento por tantas pequeñeces que solemos tener las personas, pero abrirse para reconocer lo nuestro, allí está lo virtuoso. En la Universidad hay muchas personas, todas muy valiosas y no todos han recibido este reconocimiento. Que mis pares hayan tenido esa generosidad es digno de ser destacado. Dios quiera que esto circule para que en otras partes pase lo mismo”.
Recientemente, la Facultad Eclesiástica de Teología cumplió 10 años de historia, proceso en el que también participó activamente el Dr. Harire. “Estamos convencidos de que en una Pontificia Universidad Católica, la Teología tiene que cultivarse al más alto nivel, como lo es en una Facultad. Esto lo presentamos en Roma y se entendió con nuestras características. No fue fácil, pero hubo mucha generosidad de parte de ellos y un poco de trabajo de nosotros”, concluyó.
Por Juan Paulo Roldán
Dirección General de Vinculación con el Medio
