La ingeniera pesquera de la Escuela de Ciencias del Mar, María Isabel Toledo, recibió recientemente la distinción “Fides et Labor” como reconocimiento a una larga trayectoria en la PUCV. “Es un momento de gran emoción y muy significativo para mí. A fines de enero cumplo 50 años vinculada a la PUCV y cierro una vida universitaria”, expresa.
No fueron fáciles los inicios de la académica en una época donde la industria pesquera era un terreno eminentemente masculino. “Cuando entré a la Escuela de Ciencias del Mar éramos muy pocas mujeres, no nos dejaban embarcarnos porque podíamos ojear la pesca. Fue una tarea bastante importante, derribar esa cultura. Es anecdótico, pero tuvimos que hacernos un espacio. Ese desafío me ha enseñado a lograr metas, incluso cuando hay piedras en el camino. Eso lo he tomado como una enseñanza para la vida”, recordó.
María Isabel comenzó como académica part-time y después paso a ser jornada completa. En su paso por la Universidad, abordó diversas labores, lo que le permitió conocer a muchas personas. “Una de las cosas más valiosas que la Universidad me ha dado es que he podido crecer en humanidad, sabiduría y fraternidad”, recuerda.
Durante su paso por la PUCV ha guiado a más de 44 profesionales. “La primera línea de investigación que hice fue hidrobiología, realizábamos estudios sobre los esteros de alta montaña y después hicimos siembras de trucha en función de la riqueza que había en el medio”, añade.
La nutrición de peces por la escasez de harina de pescado y la búsqueda de nuevos sustitutos para sustentar el desarrollo de la salmonicultura fue otro ámbito de investigación. Posteriormente, trabajó de manera directa con los pescadores artesanales, lo que le permitió conocer de primera fuente las dificultades de la pesca nacional.
“Cuando nació la genómica nutricional dije que se requerían explorar nuevos campos y me aboqué a trabajar con los pescadores artesanales para incrementar su productividad primaria y mejorar la abundancia de recursos bentónicos y desarrollamos una tecnología amigable con el medio ambiente”, concluye.
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