La Diócesis de Valparaíso inició formalmente las celebraciones de su primer centenario en el Santuario de Nuestra Señora Purísima de Lo Vásquez. Con más de un millón de peregrinos congregados, la Iglesia diocesana vivió el hito que marca el comienzo de su año jubilar en el día de la Inmaculada Concepción.
En la eucaristía central, el Monseñor Jorge Vega svd, Obispo de Valparaíso y Gran Canciller de nuestra casa de estudios, señaló que “en este santuario, lleno de fe y esperanza, recordamos que nuestra peregrinación a Lo Vásquez es un signo vivo de la misión evangelizadora que hemos recibido. Por eso, al celebrar el centenario de la creación de nuestra diócesis reconocemos el camino recorrido por tantas generaciones de fieles, sacerdotes, religiosos y religiosas, diáconos y laicos que han sembrado el Evangelio en los valles centrales, las montañas y las costas de esta tierra, extendiéndose incluso a las islas Robinson Crusoe y Rapa Nui”.
Asimismo, agregó que “el evangelio de hoy nos invita a contemplar a María como el templo que Dios preparó para recibir a su Hijo. Ella fue preservada de todo pecado, no por sus propios méritos, sino en atención a los méritos de Cristo, su Hijo. María es para nosotros el modelo perfecto de lo que la Iglesia está llamada a ser: una comunidad purificada y santa, que busca siempre agradar a Dios y anunciar su Reino”.
“Al iniciar este tiempo de las celebraciones del primer centenario, María, Nuestra Purísima de Lo Vásquez, nos enseña a mirar con ternura, a abrazar con amor, a congregar en unidad y a sostenernos mutuamente en la fe (…) Que la Virgen nos anime a construir una Iglesia diocesana que sea signo de gracia, servicio y alegría. Y que esta celebración nos impulse a vivir este año con espíritu de renovación, acogiendo con generosidad la invitación de María: ‘Hagan lo que Él les diga’. Confiemos a nuestra Madre Purísima el camino de nuestra diócesis en este centenario, para que, con su intercesión, seamos una Iglesia viva, evangelizadora y comprometida con el Reino de Dios”, complementó Monseñor Vega.
Por su parte, el Vice Gran Canciller, fray Cristian Eichin ofm, señaló que “para la PUCV, la celebración del centenario significa renovar su compromiso por la evangelización de la cultura, ser el lugar para el encuentro del diálogo entre fe y razón. Asimismo, la Diócesis es el espacio eclesial donde la Universidad se entiende en su sentido”.
Al respecto, agregó que “siempre la Universidad y la Diócesis han tenido un trabajo colaborativo, entre parroquias y unidades académicas, estableciéndose también un compromiso por los colegios católicos. Asimismo, existe un compromiso en conjunto por la puesta en obra del Pacto Educativo Global, iniciativa que el Papa Francisco nos ha encomendado a todas las instituciones de educación católica”.
Sobre el centenario de la Diócesis porteña, el rector Nelson Vásquez señaló que “como la principal casa de estudios superiores de la región y una de las cinco mejores del país, nacida en el seno de la Iglesia Católica, nos sumamos con alegría y gozo a esta celebración”.
“La Universidad es parte de la Iglesia y de la Diócesis. Es muy relevante imaginar caminos de colaboración para los próximos años. Esto es positivo para nuestros académicos, funcionarios y estudiantes. Para la PUCV es muy valioso estrechar vínculos con la Iglesia para que la sociedad civil reconozca todo el trabajo que está realizando en materia de acción social”, agregó el rector Vásquez.
La misa con que se iniciaron las celebraciones del centenario estuvo impregnada de signos referentes al acontecimiento eclesial diocesano, tales como la entrega a los fieles de la oración creada para la ocasión por los monasterios de vida contemplativa y la presentación de una placa con el logotipo del centenario durante el ofertorio. Además, los obispos y sacerdotes se revistieron con casullas que en su diseño incluyen el distintivo.
Por Juan Pablo Guerra
Dirección de Comunicación Estratégica