PierPaolo nos cuenta la infancia y juventud de Pier Paolo Pasolini, a través de los personajes capitales de su vida: su padre Carlo Alberto, con quien mantiene una difícil relación de odio y amor; su madre, a quien se mantendría unido hasta el fin de sus días hasta el punto de vivir bajo el mismo techo; su hermano menor Guido, que se convierte en partisano durante la Segunda Guerra Mundial, y es asesinado en extrañas circunstancias; la delicada relación de amor y amistad hacia dos mujeres: la violinista Pina Kalz, una refugiada de guerra, y la maestra de escuela María, de quien se hace novio formal; y su profundo enamoramiento de un muchacho campesino llamado Toni, cuya amistad conservaría durante toda la vida.

PierPaolo nos lleva también por los lugares que marcaron su vida (Belluno, Casarsa della Delizia, Scandiano, Conegliano, Sacile, Parma, Idria, Bolonia...) ya que desde su nacimiento, Pasolini, se convirtió en un nómada a causa de los traslados de ciudad en ciudad, debido a que su padre era militar y cada pocos meses le destinaban a un nuevo cuartel. Durante aquellos años nació su fascinación por los trenes en las largas esperas dentro de las estaciones y también su amor por la región del Friuli, a la que pertenecía su madre, y que trajo consigo el descubrimiento de un mundo arcaico y campesino que fue el motor de su creatividad. PierPaolo nos conduce de modo inevitable al escándalo que marcaría toda su vida (Ramuscello), y la huída a Roma junto a su madre para buscar un tiempo mejor...