Cuenta Anual Capítulo Académico en Claustro Pleno 2022
En el texto adjunto se da cuenta acerca de las actividades más importantes realizadas por el Capítulo Académico durante el último semestre de 2021 y el primero de 2022.
DISCURSO CAPITULO ACADEMICO
CLAUSTRO PLENO 2022
Como lo hemos hecho durante los últimos claustros, y especialmente ahora que estamos revisando nuestros Estatutos, queremos en primer lugar destacar por qué es importante cuidar a nuestro Capítulo Académico. El Capítulo es un organismo único en las universidades chilenas; colegiado, representativo, independiente y democráticamente elegido que aporta con una perspectiva exclusivamente académica al gobierno de la Universidad. Los actuales Estatutos establecen que el Capitulo debe cuidar a la Universidad a través de informes y propuestas al Consejo Superior. Otra importante tarea es la de resolver las solicitudes de jerarquización académica de los profesores y profesoras. Esto último con el objetivo de que la carrera académica no dependa de las políticas y problemas internos de las facultades y unidades académicas. Originalmente, el Capitulo fue considerado como un organismo representativo para “pensar la universidad” fundamentado en “el poder de la palabra”.
En este sentido es relevante contarles que a partir de este año su representatividad se ha visto perfeccionada gracias a la integración del Capitular de la Facultad Eclesiástica de Teología, Dr. Esteban Vargas Abarzúa. De este modo, todas las facultades de la Universidad se encuentran hoy bien representadas. También se ha avanzado en la representatividad de género, con la integración de tres académicas, incluyendo a dos capitulares y a la Secretaria Capitular, quien actúa como Ministra de Fe de nuestros procedimientos.
A modo de cuenta anual, nos gustaría contarles que el trabajo del Capítulo Académico se realizó en formato online hasta diciembre del 2021. A partir de enero del 2022, respondiendo al llamado de las autoridades de la Universidad para ocupar presencialmente las instalaciones institucionales y retomar la normalidad, dentro de lo posible, el Capítulo comenzó a sesionar de modo presencial sin interrupción hasta la fecha. Este cuerpo colegiado considera que las entrevistas presenciales y el dialogo académico que se genera con los profesores y profesoras durante su proceso de jerarquización son trascendentales para complementar la información curricular y así resolver ponderadamente. De este modo, se han resuelto 24 atribuciones (6 profesoras y 18 profesores) y 21 promociones de jerarquía (10 profesoras y 12 profesores). Paralelamente, se generó un informe de la creación de la carrera de Pedagogía en Educación Básica con Mención en Lenguaje y Comunicación. Otro informe acerca de la creación de la Escuela de Tecnología Médica. Respecto a programas de posgrado, el Capítulo generó informó acerca de la creación del Magister en Ingeniería de Procesos, del Doctorado en Industria Inteligente y del Magister en Ciencias Biológicas. En su afán de acercar nuestro quehacer al resto de la comunidad universitaria el Capítulo se reunió con diferentes autoridades y cuerpos académicos, incluyendo al Vice Gran Canciller, a los Vicerrectores de Desarrollo y Académico, los candidatos a Rector, el Director de Finanzas, los profesores de la Facultad Eclesiástica de Teología y la Comisión Calificadora de la Facultad de Ingeniería. Con el objetivo de colaborar con el proceso de reforma de los estatutos, el Capítulo se reunió en dos ocasiones con la Comisión de Reforma.
Como mencionamos en esta cuenta anual, una de las principales funciones que el Capitulo ha venido desarrollando durante los últimos 30 años ha sido participar en el proceso de creación de programas de pre y postgrado. Según mandato estatutario, el Capítulo debe “Informar al Consejo Superior acerca de los proyectos de creación de nuevos títulos y grados académicos…”. Ya desde hace algunos años, el Capítulo se ha propuesto entrevistarse con los académicos proponentes, con el fin de obtener una visión integral de cada uno de los proyectos estudiados. De acuerdo a los proponentes, este dialogo académico, persona a persona, se ha transformado en una oportunidad de poder presentar y defender oralmente sus proyectos; instancia de dialogo que el procedimiento administrativo actual no considera. Por el lado del Capítulo, cada una de las entrevistas ha servido para comprender de mucho mejor forma los objetivos y alcances de cada proyecto y así generar un mejor informe, académicamente razonado, para el Consejo Superior. De este modo, el Capítulo ha acumulado una gran experiencia que, sin lugar a dudas, es una fortaleza que la Universidad no debería perder en nuestra futura carta estatutaria.
En contraposición a estos complejos criterios y procedimientos que nuestro sistema considera para abrir una nueva carrera o programa de posgrado, su cierre de admisiones en un año en particular, que en ocasiones ha significado su cierre definitivo, es un procedimiento de una simpleza administrativa que no se condice con el cuidado y esfuerzo puesto en su apertura. El Capítulo considera que la Universidad debiese contar con criterios y procedimientos para el cierre de admisión de carreras y programas que sean congruentes con la energía y cuidado invertidos para su apertura. Estos criterios de operación académica son fundamentales para sostener la planificación estratégica universitaria en un contexto cambiante y de incertidumbre.
Considerando el complejo escenario que enfrentará nuestra Universidad, hoy más que nunca debemos destacar que la PUCV se concibe como una institución con sentido público y responsabilidad con el país. Así, el Capítulo considera que más allá de los vaivenes de la política gubernamental o de la economía nacional o mundial, la Universidad debe tener la capacidad de organizarse académicamente para el servicio público y para proponer a la sociedad rutas de desarrollo intelectual, moral y artístico de manera autónoma. ¿Será posible que nuestra PUCV logre ese nivel de autonomía? Como académicos debemos cuidar el balance entre las demandas contextuales de la política de educación superior, muchas veces transitoria, y el ejercicio de la autonomía de nuestra universidad en función del servicio público, a la luz de su misión fundacional. Hemos sido y seguiremos siendo universidad con vocación de servicio público. Por lo mismo, consideramos que nuestra universidad lejos de restringir el acceso, debe seguir acogiendo a todos y todas las estudiantes como lo ha venido haciendo a través de los años con apoyo estatal, con el fin de generar cambios no solo individuales, sino que sociales para la región y el país.
Finalmente, el Capítulo en su misión estatutaria de cuidar a la Universidad, desea destacar tres aspectos que sin duda alguna le servirán a nuestra institución para enfrentar el escenario de incertidumbre. En primer lugar, el Capítulo ha reconocido, a través de la experiencia obtenida en cientos de procesos de jerarquización, la madurez y excelencia académica alcanzada por los profesores y profesoras de nuestra universidad. El largo y complejo proceso de renovación de planta académica de nuestra universidad ha sido exitoso. Tanto la docencia como la investigación que hoy se realiza son del mejor nivel, sentando las bases de una universidad compleja de primer orden; algo ratificado en alguna medida por la obtención de la máxima acreditación institucional. Lo anterior es un aspecto clave para seguir creciendo y avanzando sustentablemente. En segundo lugar, el Capítulo considera que la reforma de Estatutos, actualmente en desarrollo, generará los criterios y procedimientos necesarios para que la institución se enfrente adecuadamente y se adapte a los nuevos escenarios de la educación superior de nuestro país. Esperamos, que esos nuevos Estatutos valoren adecuadamente el quehacer y experiencia acumulada de nuestro Capitulo Académico. Finalmente, el reciente proceso eleccionario de la Universidad, destacable por ser democrático, transparente, único en las universidades católicas chilenas, y que mostró una universidad participativa, diversa e interesada en su futuro, es una prueba de la fortaleza institucional de nuestra universidad.
Como Capitulo queremos aprovechar esta tribuna para agradecer profundamente el servicio prestado por el profesor Claudio Elórtegui Raffo, quien por 12 años dirigió nuestro destino institucional, y como lo reconoció el Gran Canciller en la ceremonia de investidura del nuevo Rector, supo cosechar de la mejor forma lo que sus predecesores sembraron. Asimismo, queremos felicitar y desearle una exitosa gestión al nuevo Rector, profesor Nelson Vásquez Lara, y a los académicos y académicas que conforman el nuevo equipo de dirección institucional. Como Capítulo ofrecemos toda nuestra colaboración y apoyo para enfrentar los desafíos institucionales e invitamos a todas y todos a trabajar conjuntamente con miras al próximo centenario de nuestra universidad, por el bienestar académico y cultural de nuestra región y país.
Muchas gracias por su atención.
Marco Cisternas Vega
Presidente Capítulo Académico PUCV