Opinión: Astrid Morales
Enseñanza de la matemática en tiempos de pandemia
El año 2020 iniciamos un camino de reflexión, de crecimiento muy interesante. La pandemia ha afectado en todos los ámbitos, quizás de manera más evidente en el área de Salud y de la Enseñanza.
El año 2020 iniciamos un camino de reflexión, de crecimiento muy interesante. La pandemia ha afectado en todos los ámbitos, quizás de manera más evidente en el área de Salud y de la Enseñanza. Quisiera compartir una reflexión de lo que he visto en el ámbito de la enseñanza y aprendizaje de la matemática, como jefa de carrera de pedagogía en Matemáticas de la PUCV. No cabe duda de que la enseñanza y el aprendizaje de la matemática han sufrido transformaciones importantes y necesarias en el momento que estamos viviendo por la pandemia. Hoy en día, tanto los profesores como los estudiantes han sido afectados por este cambio de escenario y en cómo usualmente llevan a cabo las clases y la dinámica de enseñanza en general. Sin duda que el rol de la tecnología ha sido de vital importancia, no solo para ser aplicada en algunos problemas o temas específicos a tratar en clases, sino que se expande a pensar que los estudiantes cuenten con acceso a internet, tengan algún dispositivo (tablet, celular notebook, etc.) para participar de clases, realizar evaluaciones, trabajar en grupos, etc.
Esta dinámica nos invita a cuestionarnos el cómo se están realizando las clases, cómo se está evaluando y cómo podemos darnos cuenta que los estudiantes, en clases virtuales, estén logrando los aprendizajes esperados. Preguntarnos qué es lo fundamental que el estudiante debe aprender en las asignaturas que cursa; en la enseñanza de la matemática, hacer énfasis en los procedimientos quizás no es el camino más adecuado, debemos buscar estraretagias para que nuestros estudiantes se reencanten con lo que es hacer matemática.
En otro ámbito, nos preguntamos cómo se logra que los estudiantes tengan identidad en la institución en que estudian si no conocen el lugar, no han podido conocer del todo a sus compañeros y profesores. Se ha disminuido el trabajo en grupo y aumentado el trabajo individual; en sí, ello no es negativo, pero se requiere de cierta madurez para salir adelante.
Todos estos elementos que comparto, pueden ser conocidos para muchos, sin emabrgo debemos enfrentar estos cambios no de manera aislada, conversar con colegas, con estudiantes y buscar estrategias para apoyarnos y analizar qué es lo que debemos hacer en pro de construir conocimiento.
Astrid Morales Soto
Jefa de Carrera Pedagogía en Matemáticas
Instituto de Matemáticas-PUCV