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"Los aprendizajes adquiridos en el Diplomado contribuyen al mejoramiento del aprendizaje de los estudiantes con un proceso continuo y planificado"

Marisol del Carmen Pérez Huerta, Religiosa de la Inmaculada Concepción de Nuestra Señora de Lourdes, formó parte del 2do Diplomado Virtual "Nuevo Programa de Religión Católica: bases curriculares, estrategias didácticas y evaluación", dictado por el ICR PUCV y certificado por el CPEIP del Ministerio de Educación.

07.12.21

Profesores de religión y directivos de establecimientos educacionales provenientes de diferentes regiones del país participaron en la 2da. edición del  Diplomado "Nuevo Programa de Religión Católica: bases curriculares, estrategias didácticas y evaluación - Año 2021", modalidad virtual, instancia de formación continua impartida por el Instituto de Ciencias Religiosas PUCV que entregó herramientas a docentes y directivos en el marco del cambio de enfoque para la clase de Religión que propone el nuevo currículum nacional.

Para la hermana Marisol Pérez Huerta, religiosa de la Inmaculada Concepción de Ntra. Sra. de Lourdes y docente de Religión en el Colegio San Nicolás de Bari de Rancagua, los aprendizajes adquiridos en esta acción formativa contribuye al mejoramiento del aprendizaje de sus estudiantes, ayudando "a asumir un carácter formativo y de retroalimentación para mejorar la calidad de las acciones emprendidas y que van en función del aprendizaje de los estudiantes".

"Es decir, evaluar cómo aprenden los estudiantes y cómo deberían enseñar los docentes, aquí se abre un proceso de interacción entre profesor y alumno. Veo necesario también la contribución del uso de estrategias de enseñanza como el  trabajo participativo y colaborativo de los docentes que se puede utilizar como medida donde nosotros podemos transformar la sala de clases en un espacio de aprendizaje ajustado a los estudiantes  y a la realidad del entorno educativo, social, familiar, cultural y socio económico que se vive en la actualidad", sentencia Pérez, quien también participa de la pastoral en la Parroquia San Francisco de Asís de Rancagua y de la Pastoral de la Salud en el Hospital Regional de Rancagua.

En su opinión, "otra contribución es encontrar los recursos y herramientas que de una manera objetiva reflejen el aprendizaje de los estudiantes, dando la oportunidad a cada estudiante para que exprese el dominio de destrezas motrices, estrategias cognitivas y actitudes detectando las deficiencias, logros que presentan los alumnos en sus aprendizajes, debemos tener en cuenta que no se debe solo evaluar el proceso de aprendizaje del estudiante, sino que también se debe evaluar el proceso de enseñanza. Por lo mismo, los docentes debemos acompañar a los alumnos para guiar el proceso de aprendizaje del estudiante que es lo que tienen que aprender, como usar ese conocimiento y cómo demostrar el aprendizaje obtenido siendo este el conocer las herramientas para aplicar la evaluación formativa en el mejoramiento del proceso de enseñanza aprendizaje en nuestra área".

  • ¿Cómo esta acción formativa ha respondido a los desafíos que Ud. enfrenta como profesor de religión?

Respondo a esta pregunta aludiendo a un ensayo que presenté en el mismo diplomado como trabajo y que mantengo como aprendizaje para mi trabajo docente y que comienzo con esta frase: “es necesario que la enseñanza religiosa escolar aparezca como disciplina escolar, con la misma exigencia de sistematicidad y rigor que las demás materias. Ha de presentar el mensaje y acontecimiento cristiano con la misma seriedad y profundidad con que  las demás disciplinas presentan sus saberes. No sé sitúa, sin embargo, junto a ellas como algo accesorio, sino en un necesario diálogo interdisciplinario´ (DGC 73)” (Declaración de la Sagrada Congregación para la Educación Católica sobre la religión en la escuela).

He abrigado la esperanza de que esta propuesta del Nuevo Programa de Religión Católica sea de gran utilidad para afianzar la Enseñanza Religiosa escolar en el contexto de una sociedad cada vez más compleja a la que, como nos enseña el Papa Francisco, tenemos que servir con el gozo del Evangelio (...) Estamosen un tiempo donde lo religioso ha perdido credibilidad en cuanto a la institucionalidad, es una gran tarea, y un desafío hoy presentar una clase de religión distinta a lo que hacíamos antes y así poder obtener un crecimiento significativo de los estudiantes dentro de la sociedad en su conjunto. Mirando este último tiempo, que desde los ámbitos social y educativo, han surgido diversos desafíos a las y los docentes de Religión. Hemos vivido una situación al límite, llena de necesidades, exigencias, y porque no decirlo de dolor, en medio de nuestro servicio pedagógico, ya sea por razones personales, familiares, pedagógicas, eclesiales, etc. quienes ejercemos esta hermosa asignatura, junto con los demás docentes y miembros de las comunidades educativas, hemos tenido que hacer frente a muchas dificultades.

En este sentido, Marisol explica que las palabras del Papa Francisco son de gran ánimo para renovar la pasión educativa: “Él dice: No se desanimen ante las dificultades que presenta el desafío educativo. Educar no es una profesión, sino una actitud, un modo de ser; para educar es necesario salir de uno mismo y estar en medio de los jóvenes, acompañarles en las etapas de su crecimiento poniéndose a su lado. Donadles esperanza, optimismo para su camino por el mundo. Enseñar a ver la belleza y la bondad de la creación y del hombre, que conserva siempre la impronta del Creador. Pero sobre todo sean testigos con su vida de aquello que transmiten. Un educador, con sus palabras transmite conocimientos, valores, pero será incisivo en los muchachos si acompaña las palabras con su testimonio, con su coherencia de vida.” He aquí el rol fundamental de Iglesia, de ir mirando  más allá de las estructuras, orientar a nuestros docentes para los nuevos desafíos educativos que se están presentando y ya se comenzó con instancias como estas, que fortalecen el Nuevo Programa de Religión".