25.04.2019

Con una solemne ceremonia, la Escuela de Pedagogía de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso celebró la inauguración de su año académico 2019, el cual coincidió a la vez con la conmemoración de los 60 años de existencia de esta Unidad Académica.

La actividad se llevó a cabo en el Salón de Honor de nuestra Casa Central y contó con la participación del vicerrector de Desarrollo de la PUCV, Arturo Chicano, la directora de la Escuela de Pedagogía, Vanessa Vega, el director y académico del Liceo Bicentenario de Excelencia Polivalente San Nicolás de Ñuble, Víctor Reyes, autoridades y docentes de nuestra Casa de Estudios y miembros de la comunidad universitaria, entre otros.

“Cumplir hoy más de medio siglo es una gran alegría y no podemos decir que ha sido fácil”, expresó la directora de Pedagogía, respecto a la coincidencia entre la inauguración del año académico y la conmemoración de las seis décadas de existencia que ha cumplido su Unidad Académica. Aseguró también que esta Escuela ha pasado a ser un referente en el ámbito de la educación, tanto en pregrado como postgrado.

La académica destacó que “la misión de nuestra Escuela es la formación de profesores con vocación de servicio, responsables socialmente, competentes, autónomos y preparados para el trabajo colaborativo, con el propósito de enfrentar los desafíos de la educación”.

LICEO POLIVALENTE SAN NICOLÁS: EDUCACIÓN RUPTURISTA

“Memoria e Identidad: el saber pedagógico desde lo situado” fue el coloquio precedido por Víctor Reyes, profesor de química del Liceo Bicentenario de Excelencia Polivalente San Nicolás, cuya labor como docente ha trascendido a nivel nacional, fruto de su innovador proyecto educativo de alto impacto social, que logró transformar esta institución en “el mejor liceo de Chile”, según los medios nacionales.

Según el académico explica, llegó a un lugar donde “abundaba la oscuridad y era difícil mantener el entusiasmo” con el cual se recibió como profesional. Un colegio con estudiantes vulnerables y poco apoyo por parte de las autoridades regionales era el desafío para Reyes y sus compañeros docentes al iniciar con la transformación educativa del San Nicolás.

“Trabajamos casi en la clandestinidad, para que no descubrieran lo que estábamos haciendo porque no era lógico oponerse al sistema (educacional)”, criticó. Ya para cuando postularon al proyecto Bicentenario como liceo, aseguró que “lo que yo más rescato de éste es la libertad de cátedra y la autonomía que entregan a los colegios”.

Fue entonces que el profesional y su equipo reveló lo que estaban haciendo, “era algo totalmente rupturista. En 2010 ya teníamos más ingresos a la universidad, comenzamos con mejores resultados académicos en SIMCE, etc”.

Aprovechó de asegurar que en su establecimiento educacional no están muy de acuerdo con los estándares que el SIMCE representa. “El trabajo que se hace (en el liceo) del SIMCE es una consecuencia más que un fin. No mide calidad, es sólo un indicador”. Afirmó que “para nosotros la educación es integral, y esta tiene que desarrollar todos los potenciales del ser humano. Esto porque nosotros queremos que nuestros alumnos sean felices”.

El vicerrector de Desarrollo, quien enfatizó su notoria admiración por el académico de Ñuble al finalizar éste su presentación: “de verdad me deja sin palabras”. También aseguró que en la educación se valora muchísimo más el “saber escuchar a los demás”, trabajo que ha logrado con éxito Víctor Reyes en su constante labor junto a la comunidad educativa del Liceo San Nicolás.

Por Macarena Rojas

Dirección General de Vinculación con el Medio