Presbítero Rubén Castro Rojas
Primer Rector
PRESBÍTERO DON RUBÉN CASTRO ROJAS
1928-1934
El Presbítero Rubén Castro Rojas nació en la ciudad de Rancagua, el 22 de diciembre de 1882, en la familia de don Baltasar Castro Godoy y de doña Filomena Rojas Franchiny. Ingresó muy pequeño al Seminario de los Santos Ángeles Custodios, en Santiago. En 1906, antes de recibir el presbiterado, ya era profesor del Colegio eclesiástico capitalino, cargo que desempeño hasta después de su ordenación sacerdotal, el 21 de marzo de 1907. Desde sus años de seminarista demostró mucho ingenio y dedicación al estudio. Realizó trabajos de gran mérito, muy celebrados en la Academia de San Agustín.
El 07 de marzo de 1912 fue designado párroco en la ciudad de Quillota. Durante los 9 años de su permanencia, realizó un fecundo apostolado y contribuyó con su trabajo y entusiasmo a la creación del Instituto Rafael Ariztía y otras obras de beneficencia. Razones personales lo motivaron, en diciembre de 1921, a dejar esta localidad. Para 1924, residía en Santiago y aceptaba un ofrecimiento para atender la capellanía de la Casa de Ejercicios de San Juan Bautista.
En 1925, Rubén Castro viajó a Valparaíso, de cuyo Seminario era profesor y donde se había desempeñado como Secretario de la Gobernación Eclesiástica. Su traslado coincidió con la erección, a fines de ese año, de la diócesis porteña. De inmediato, el primer obispo, Monseñor Eduardo Gimpert P., conocedor del talento y espíritu organizador del activo prelado, lo designó, en 1927, asesor de los estudiantes católicos.
En marzo de 1928, el Pbro. Rubén Castro fue designado Rector de la Universidad Católica de Valparaíso, con cuya Fundación cooperó activamente. Dice el Acta de nombramiento: "para que ejerza el cargo de Rector y tenga la representación legal y canónica de dicha Iglesia y las particulares de la autoridad diocesana".
El Rector asumió la tarea de dirigir la etapa inicial de esta Casa de Estudios. Desde que asumió la dirección y organizó los Planes de Estudios -de la que llamaba "Mi Universidad"- dotó al plantel y sus instalaciones con todos los adelantos que la época permitía. Este celo suyo, no impidió que se clausurara por un breve lapso el establecimiento, debido a una sublevación estudiantil.
Su amor a los pobres, lo motivó a imprimir a la Universidad, un carácter más industrial que humanístico y científico; él quería que sirviera, principalmente, a la clase obrera y a la minería. Su porte, digno, inspiraba respeto y simpatía. De regular estatura, tez blanca, frente amplia, ojos claros y grandes. Poseía una voz rica, potente y musical. Vestía con decoro; nunca recibió una distinción prelaticia, pero era tan poderosa su personalidad moral e intelectual que, como a la mayoría de los eclesiásticos de su tiempo, le bastaba, para honores, con la suprema dignidad del sacerdocio.
Murió el 30 de diciembre de 1934, en el Hospital Alemán de Valparaíso, víctima de un edema pulmonar. Sus restos descansan en el Cementerio Católico Nº 1 de esta ciudad.
- Discursos
- Discurso de inauguración de la Universidad, 1928
- Discurso por inauguración de 4 carreras
- Cartas
- A Emilio Tagle Covarrubias 1925
- A Emilio Tagle Covarrubias 1926
- Manuscritos