18.11.2020

Desde el año 2018 entró en vigor en nuestro país nuevas reglas que modifican aspectos relevantes en materia evaluativas. El documento que promueve estos cambios es el decreto 67 (MINEDUC, 2018) que aprueba normas mínimas nacionales sobre Evaluación, Calificación y Promoción de Escolares. Los objetivos del nuevo reglamento apuntan a lograr un mejor uso pedagógico de las evaluaciones y reducir los niveles de repitencia escolar, otorgando un mayor acompañamiento.

Si bien, inicialmente, fue un desafío para los establecimientos educacionales construir nuevos reglamentos de evaluación, este decreto apareció en un momento donde este ejercicio adquiere nuevos significados si consideramos el actual contexto de emergencia sanitaria mundial y la necesidad de impartir las clases en modalidad online.

Precisamente, con el objetivo de socializar la incidencia de este decreto la Facultad de Filosofía y Educación y el Magister en Educación mención Evaluación Educativa de la PUCV, organizaron un conversatorio que contó con la participación de los siguientes expositores: Maura Amaranti Pesce, académica de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, especialista en Evaluación del Aprendizaje; Oscar Valenzuela Flores, profesor de Historia, Geografía y Ciencias Sociales del Colegio María Auxiliadora de Valparaíso; Verónica Barreto Escobar, directora del Colegio Carlomagno de Quilpué y Gloria Contreras Pérez, académica de la Escuela de Pedagogía PUCV, especialista en Evaluación del Aprendizaje. Moderó la iniciativa: Carmen Oyanedel Bernal, profesora de Historia, Geografía y Ciencias Sociales y estudiante del Magíster en Educación mención Evaluación Educativa de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso.

“El decreto 67 de los elementos que tiene, que yo creo, son los más destacables, destaca el tema de la retroalimentación. Los criterios de evaluación no solamente como una forma de privilegiar la evaluación formativa, sino que además como una manera de trabajo conjunto entre los profesores, y que después son comunicados a los estudiantes. Se diversifica la evaluación y se promueve también para poder construir el reglamento de evaluación, el trabajo de los equipos, directivos, técnicos junto con los profesores. Por lo tanto, lo que yo veo, a pesar de que ha habido históricamente poco apoyo de la evaluación formativa de parte de la política pública, yo diría, que en los últimos años hemos presenciado un camino para favorecerla en los colegios”, concluyó la Dra. Gloria Contreras Pérez, académica de la Escuela de Pedagogía, especialista en Evaluación del Aprendizaje, y vicedecana de la Facultad de Filosofía y Educación.

Ver Conversatorio en el siguiente link