Profesora de Tecnología Médica participa en atención oftalmológica en el Amazonas
La región amazónica se caracteriza por una alta incidencia de enfermedades visuales, muchas de ellas agravadas por la exposición a altos niveles de radiación ultravioleta (UV) superiores a otras latitudes. Entre las patologías más comunes se encuentran las cataratas, el pterigión (terigio) y la presbicia precoz, que afecta la visión cercana de manera prematura. Estas condiciones, si no son tratadas, pueden causar una disminución significativa en la calidad de vida de las personas.
En ese contexo el Profesor Rubens Belfort de la Universidad federal de Sao Paulo ha adjudicado un proyecto en el que participa la profesora de la Escuela de Tecnología Médica de la PUCV, Ariane Lüttecke, y cuyos resultados tributarán a su tesis en el programa de Doctorado en Ciencias Visuales de la misma universidad. Para ello la académica estuvo 14 días en el amazonas brasileño para atender con exámenes visuales a la población de Barcelos y sus alrededores.
El viaje a la comunidad de Barcelos, en el corazón del Amazonas y el programa de trabajo, buscan atender las necesidades visuales de las personas que viven en zonas de difícil acceso, quienes enfrentan barreras geográficas para recibir atención médica especializada. El problema de la movilización radica en que, el acceso dentro del Amazonas es casi exclusivamente fluvial, lo que implica que los tiempos de traslado sean muy extensos en caso de requerir atención especializada en centros urbanos.
Esta primera etapa avanza en torno a tres ejes de intervención, siendo uno de ellos el que la profesora de la PUCV, asumirá como parte de su tesis doctoral. Durante su reciente estadía en Barcelos, Lüttecke y su equipo de trabajo atendieron a cerca de 500 personas, de las cuales casi 300 recibieron un chequeo oftalmológico completo. "Categorizamos a los pacientes para cirugías de cataratas, cirugía de pterigión o con presbicia", explica Lüttecke.
Las atenciones se realizaron en el Hospital del lugar, hasta donde se trasladó todo el instrumental y suministros necesarios para los chequeos oftalmológicos. La dedicación del equipo no solo se enfocó en atender a los pacientes, sino también en capacitar al personal técnico local. "Entrenamos a técnicos en enfermería para que aprendieran a realizar encuestas, tomar fotografías y hacer el triaje de los pacientes", señala la profesora de la Escuela de Tecnología Médica, enfatizando la importancia de dejar una capacidad instalada en la comunidad.
La académica de la PUCV agradece haber sido parte de esta experiencia, pudiendo entregar acceso a la salud pese a las dificultades de operar en estos espacios, los largos horarios de trabajo y las dificultades propias del Amazonas, señalando: “La experiencia ha sido increíble, aunque bastante agotador porque atendíamos gente desde antes de las 8 de la mañana hasta las 21:00 hrs durante 9 días, los demás fueron días completos de viaje. Geográficamente es muy distinto a Chile, el Río Negro con sus oscuras aguas que se pierden en el follaje de los bosques no permiten identificar dónde termina el rio y empieza la tierra y entremedio se divisan pequeños canales por los que se intuye podría haber acceso a alguna vivienda o comunidad, las personas se movilizan en sus pequeñas lanchas”.
En la próxima fase, se espera realizar cirugías a los pacientes diagnosticados con cataratas y pterigión, además de evaluar parámetros de calidad de vida e impacto de las intervenciones continuando así con la labor de mejorar el bienestar de los habitantes de esta región tan aislada.