PUCV desarrolla masiva jornada sobre buenas prácticas en el trabajo con personas migrantes

Las personas migrantes representan casi el 10% de la población, según informó el Servicio Nacional de Migraciones (SERMIG) y el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), a finales del 2024. 

Descripción de imagen: María Emilia Tijoux, académica U. de Chile dictando charla magistral en jornada. 

El Aulario de la Facultad de Ingeniería de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso fue escenario de la Jornada de buenas prácticas en el trabajo con personas migrantes, organizado por el proyecto PUCV Prioriza y el Programa de Interculturalidad de la Dirección de Inclusión, de la Vicerrectoría de Vinculación con el Medio. 

El espacio tuvo por objetivo generar un espacio de diálogo respecto al racismo y los desafíos para el trabajo con personas migrantes en Chile. Contó con la participación de la Dra. María Emilia Tijoux, académica de la Escuela de Sociología de la Universidad de Chile, quien dictó la charla magistral: “¿De qué hablamos cuando decimos racismo?”, donde abordó la construcción de la identidad social, la migración como un fenómeno global y la interculturalidad en áreas como la salud, educación, entre otros. 

Municipalidades, organizaciones sociales, estudiantes y comunidades escolares, fueron parte de los asistentes, una evidencia del sentido de “universidad abierta”, según expresó Vanessa Vega Córdova, directora de Inclusión.  “Son relevantes (estos espacios) para nuestra institución ya que nos conecta con el territorio, con los espacios, con las necesidades de las personas” añadió Vega. 

María Emilia Tijoux, por su parte, señaló que “Es indispensable participar en estos espacios que son transculturales -diría yo- que apelan a distintas organizaciones sociales, universidades, grupos de estudio, y personas interesadas en reflexionar de manera crítica que contenga muchas preguntas y de cierto modo, disminuir la violencia al interior de las desigualdades sociales”. La participación de la académica e investigadora se enmarca en el trabajo que está desarrollando en el proyecto Fondecyt N°1240125 “Migraciones y trabajo”.

Tras su intervención se desarrolló una mesa de diálogos sobre buenas prácticas para el trabajo con personas migrantes, en donde participó: Males Vallejo, coordinador del proyecto Raíces en Resistencia de la Colectiva Escena Migrante; Dra. Natalie Rodríguez, docente de la Escuela de Psicología PUCV y colaboradora del Proyecto PUCV Prioriza; Raimunda Romero, coordinadora del proyecto Transitando nuevos senderos, y encargada del acompañamiento socioemocional de la Oficina Comunal de Personas Migrantes, de la I. Municipalidad de Valparaíso, y por último, Nikolai Borella, Coordinador de prácticas y profesor colaborador, Escuela de Sociología, Universidad de Valparaíso. 

Males, valoró la instancia, destacando que “Es importante esta articulación entre la academia y las organizaciones migrantes, los proyectos interculturales migrantes, porque es muy necesario unir estrategias de comunicación y resistencia ante todas las problemáticas y violencias estructurales que vivimos”. 

Un espacio fundamental 

Leonardo Córdova, Delegado Episcopal para el Desarrollo Humano Integral de la Diócesis de Valparaíso, y director de Caritas, asistió a la jornada y sostuvo que “estos espacios son fundamentales para la vida, no solo académica, sino para nuestra vida comunitaria como región de Valparaíso. Es importante generar estos momentos en que, con un lenguaje sencillo, pongan en evidencia la necesaria urgencia de ir haciendo cambios en nuestros comportamientos cotidianos para acoger de verdad, para poder incluir de manera real a una comunidad de migrantes que son parte de nuestra historia”. 

Elisa Muñoz y Nashla Sáez, son estudiantes de trabajo social y asistieron al espacio. Sáez sostuvo que “esta jornada nos aportó mucho al proceso formativo que estamos llevando a cabo en la universidad, me abrió una nueva esfera en cuanto a la información de la población migrante”. 

“Es nutritivo porque nos permitió conocer experiencias de personas migrantes y no migrantes, y comprender cómo la interculturalidad nos permite acercarnos, encontrarnos y generar buenas prácticas más allá de lo académico”, concluyó Elisa Muñoz.