En la Sala Emilio Tagle de la Casa Central se efectuó el Taller "Abordaje del Trastorno del Espectro Autista (TEA)", el que fue organizado por la Comisión de Inclusión del Consejo de Rectores de Valparaíso (CRUV) y la Unidad de Mejoramiento de la Docencia Universitaria (UMDU) de la PUCV, el que contó con la asistencia de profesores de distintas unidades académicas de nuestra Casa de Estudios.

La sesión fue realizada por la profesora Sandra Kreisel e incluyó una primera parte teórica para concluir con una fase práctica donde se analizaron una serie de casos.

En la ocasión, se aplicó un cuestionario con preguntas como: ¿Prefiere hacer cosas solo en lugar de con otras personas? ¿A menudo se fija en las matrículas de los autos u otras cadenas de información similares? ¿No le molesta que su rutina sea interrumpida? La idea era pesquisar ciertos elementos que se repiten en las personas que poseen este trastorno.

Al respecto, la encargada del programa PUCV Inclusiva, Viviana Castrillón, recordó que este taller se enmarca dentro de la conmemoración de los 50 años del Consejo de Rectores de Valparaíso (CRUV) y se espera que en cada institución los profesores puedan tomar conocimiento de las estrategias que se deben abordar en la sala de clases a los estudiantes con TEA para que su inclusión en la Educación Superior sea cada día mejor.

"Esperamos que los académicos cuenten con los diversos elementos para que los alumnos con TEA se consideren uno más dentro del curso y no como una persona extraña. Esto contribuye a incorporarlos dentro del grupo curso y que no sean estigmatizados, pues esto no favorece a la inclusión", señaló.

De las cuatro universidades del CRUV, la PUCV es la que tiene más alumnos que han declarado su condición de trastorno del espectro autista. Desde 2008 a la fecha, nuestra Casa de Estudios ha tenido a 97 alumnos con TEA, pero es importante agregar que muchos alumnos no lo declaran, pues es un acto voluntario. Este año se matricularon 23 alumnos con este tipo de trastorno", indicó.

Al respecto, la profesora Kreisel agregó que las personas con TEA tienen una forma distinta de cognición, es decir, su cerebro procesa la información de manera diferente. La atención, almacenamiento y recuerdos son distintos, por ejemplo, tienen a pensar en imágenes, escuchan, sienten y ven pero sus cerebros utilizan la información de otra forma.

Entre las fortalezas de las personas con TEA se encuentra que cuentan con una inteligencia normal o superior, poseen un buen nivel de lenguaje y amplio vocabulario, son capaces de efectuar una buena decodificación lectora, tienen habilidades con la tecnología, son ordenados y estructurados y son excelentes trabajadores.

Como debilidades, presentan dificultades con el pensamiento abstracto y tienen un déficit en habilidades de comprensión, interpretación y evaluación crítica. Son limitados en la capacidad de imaginación y ofrecen una falta de motivación cuando se les pide ayuda con temas lejanos a sus áreas de interés. Son rígidos en sus pensamientos y opiniones y tienen miedo al rechazo.

PROFESORES DESTACARON TALLER

Karla Carreño, es tutora estudiantil de la Escuela de Ingeniería Informática de la PUCV y valoró el trabajo realizado durante el taller. "Esta iniciativa me parece muy importante porque cada año se están sumando más alumnos con esta condición. En la Escuela, especialmente entre los ingenieros en ejecución tenemos un perfil bien particular. Hemos recibido a alumnos introvertidos que privilegian el trabajo individual y tienen menos habilidades sociales. Como tutora he visto este trastorno en los alumnos. Es importante compartir lo aprendido con los profesores. Vemos los indicadores y cuando lo amerita hacemos las derivaciones correspondientes a la Dirección de Asuntos Estudiantiles", agregó.

Hanns de la Fuente es académico de la Escuela de Comercio y destacó el nivel de la capacitación. "Siempre ha habido diversidad dentro del estudiantado que ingresa a la Universidad, pero ahora hay nuevo conocimiento para identificarla y abordar cómo se trabaja con ellos. Fue un taller bastante concreto y aplicado. Uno tiende a pensar que sólo existen puntos débiles en este tipo de condiciones y no es así. Ha sido interesante conocer las fortalezas que tienen los estudiantes con TEA. Aprendimos algunos instrumentos, metodologías y técnicas para trabajar con ellos", concluyó.

Por Juan Paulo Roldán
Dirección General de Vinculación con el Medio