Con un hermoso concierto que partió con el gran genio del Barroco, Johann Sebastian Bach y la Cantata BW4 “Cristo Muere en la Cruz” a cargo de la Orquesta Clásica y el Coro de Cámara PUCV, comenzaron las actividades en la Casa Central del nuevo rector de la PUCV, Dr. Nelson Vásquez Lara, como un valioso regalo para la comunidad universitaria en el corazón de la PUCV.
En la Sala Multiuso de Casa Central PUCV se reunieron autoridades, académicos, funcionarios y algunos alumnos para disfrutar de un Concierto de Apertura a la Asunción del Rector con una excelente acústica y además fue transmitido en vivo por los canales digitales de la Universidad.
El programa contempló además la interpretación de las obras “Momentos” de Beatriz Corona (Cuba); “Adiós Nonino” de Astor Piazzolla y la Sinfonía N° 1 en Re Mayor de Carl E. Bach. Ambas agrupaciones fueron dirigidas magistralmente por el académico Pablo Alvarado Gutiérrez y en la dirección vocal estuvo la intérprete Loreto Pizarro.
En la ocasión, el rector Nelson Vásquez destacó que contar con ambas agrupaciones es un honor. “Para nuestra Universidad es muy importante iniciar esta Rectoría con música. Pensamos en varios momentos sobre cómo comenzar nuestra gestión y nos dimos cuenta que la mejor forma es partir con Arte y Música. Una Universidad con más belleza es más plena. Quiero agradecer en primer lugar a la Orquesta y al Coro de la PUCV, a su director Pablo Alvarado, que estuvo dispuesto desde el primer momento en realizar esta actividad”, señaló.
“Es un regalo para la Universidad y un esfuerzo institucional que lleva varias décadas, fortaleciendo lo que es este desarrollo. Agradecemos también a la Dirección General de Vinculación con el Medio por acercarnos al Arte y a la Música, en un momento en que nuestra Casa de Estudios cuenta con un edificio restaurado para acoger a estas agrupaciones. De esta manera, estamos reconociendo también al Instituto de Música que lleva varios años en un esfuerzo institucional tanto en el Conservatorio como en el Instituto, creando y desarrollando talento”, complementó.
“Hoy reconocemos a múltiples profesores que están en el quehacer universitario. Pero también valoramos a los intérpretes porque cuando ellos nos muestran la obra de un autor hacen que ella reviva. Es un gusto escuchar este concierto preparado por la Orquesta y el Coro para iniciar una Rectoría que quiere partir con Arte y Belleza”, agregó.
SOBRE EL CONCIERTO
El programa del concierto partió y finalizó con la obra de dos compositores esenciales que abren y cierran el periodo del Barroco (1685-1750). Johann Sebastian Bach con su creación: la Cantata BWV 4 “Cristo Muere en la Cruz, escrita en la primera década del 1700 y una de sus cantatas eminentemente corales con acompañamiento instrumental, basada en un coral de Martín Lutero. Esta creación que posee siete movimientos destaca por la inclusión de un coro y las variaciones que dispone con la participación de sopranos, contraltos, tenores y bajos, finalizando todos juntos.
Luego se ofreció la obra “Momentos” para violín, piano y cuerdas de la compositora cubana Beatriz Corona, eximia autora cubana que cuenta con un amplio catálogo de obras que se interpretan a nivel internacional. Esta obra de una gran belleza armónica destaca por la participación conjunta entre la orquesta de cuerdas y el piano, muy al estilo desarrollado por otros autores como Claude Debussy o Maurice Ravel.
A continuación, se interpretó la obra “Adiós Nonino” del compositor Astor Piazzolla compuesta en 1959 luego de la muerte del papá del autor. Un renovador del tango, Piazzolla fue admirado por muchos, pero también tuvo detractores por incorporar elementos del jazz y la música clásica a su arte. Sin embargo, muchas de sus composiciones hoy son reconocidas e interpretadas en el mundo entero, siendo considerado un verdadero embajador musical de Argentina. Gran interpretación de esta obra en el piano con la solista Analia Marigliano y también del solista en violín, Manuel Simpson.
Finalmente, se ofreció la Sinfonía N° 1 de Carl Phillip Emanuel Bach, hijo de Johann Sebastian, que forma parte de una serie de cuatro sinfonías dedicadas a Federico I de Prusia. Su música es reconocida como parte del periodo “galante”, época que marca también el inicio del clasicismo. Aprendió el arte musical de su padre, de esta manera, en el programa se funden la transmisión y la apertura como dos ejes fundamentales del desarrollo del conocimiento musical.
Como un “bis” fuera de programa se ofreció “La muerte del Ángel” de Astor Piazzolla, lo que fue recibido gratamente por el público.
El concierto quedó disponible también en internet:
Por Juan Paulo Roldán
Dirección General de Vinculación con el Medio
Fotos: Ángela Tobón Coral