En los últimos años, la PUCV ha fortalecido su solidez financiera mediante acciones sostenibles que han optimizado recursos y asegurado la continuidad de sus programas académicos, de investigación y vinculación social, junto con robustecer el bienestar laboral de su personal académico y de apoyo a la academia.
Un análisis integral de su situación económica, evidencia cinco fortalezas clave: una estructura de capital sólida, con un patrimonio que representa el 71,5% del financiamiento total y un crecimiento del 10,1% en el último año; una gestión eficiente de la liquidez; una inversión estratégica en infraestructura y fondo patrimonial; un endeudamiento controlado, vinculado a proyectos de largo plazo; y una coherencia entre indicadores financieros que posicionan a la Institución en rango de excelencia a nivel nacional.
En 2024, la Universidad cerró con un resultado financiero positivo, que permitió potenciar el Endowment e invertir más de $14 mil millones en infraestructura. En la última década, la inversión acumulada supera los 150 millones de dólares y, además, la Institución robusteció sus programas de becas y bienestar.
Al respecto, el vicerrector de Administración y Finanzas, Álex Paz, sostuvo que invertir en infraestructura y calidad de vida refuerza el corazón del proyecto universitario: “Cada mejora impacta en cómo enseñamos, investigamos y convivimos como comunidad”. Asimismo, señaló que la gestión de los últimos gobiernos universitarios ha permitido proyectar una universidad más preparada para enfrentar con solidez los desafíos académicos, sociales y económicos del futuro.
Mejora en remuneraciones y reconocimiento a la carrera académica
Como parte del fortalecimiento de la carrera académica, la Universidad implementó entre 2024 y 2025 una política de reajuste salarial progresiva, enfocada en quienes inician su trayectoria profesional. En 2024 se aplicó un reajuste general del 1% real sobre el IPC, y en 2025 se otorgaron aumentos diferenciados de hasta un 16% nominal para profesores asociados, buscando responder a las demandas del sistema universitario y atraer nuevos talentos.
Asimismo, se instauró un Programa Especial de Retiro para profesores de planta no jerarquizada, reconociendo su aporte al desarrollo institucional. El plan incluye una indemnización voluntaria mejorada, opción de reincorporación como profesor agregado y mantención de beneficios, garantizando una transición laboral digna y respetuosa.
Sistema Integral de Beneficios
Con una visión centrada en las personas, la Universidad consolidó el Sistema Integral de Beneficios PUCV, que articula condiciones laborales justas, desarrollo profesional y apoyo al bienestar físico, mental y social. Entre sus avances recientes destacan la jornada laboral de 40 horas, permisos especiales, becas de formación continua, un seguro oncológico para rentas bajas y la exención total del arancel de pregrado para cargas familiares.
Sobre este tema, Ramón Páez, director de Personas, señaló que “no se trata solo de entregar beneficios, sino de reconocer que detrás de cada función hay una persona con proyectos de vida y necesidades reales. En la PUCV entendemos que la relación laboral no se limita a una remuneración; buscamos acompañar, cuidar y generar pertenencia en quienes sostienen nuestra misión universitaria”.
Estas acciones, junto con políticas como la indemnización por retiro sin tope y un sueldo mínimo institucional superior al legal, reflejan un modelo progresivo que promueve la equidad, el reconocimiento y la pertenencia. Actualmente, la Universidad prepara un programa para facilitar el acceso a la primera vivienda para académicos, reafirmando su compromiso con el bienestar integral en un contexto desafiante.
En esa línea, Páez concluyó que “este sistema de beneficios posiciona a la PUCV como un referente en bienestar dentro del sistema de educación superior, lo cual demuestra que poner a las personas en el centro fortalece a la Univervsidad y proyecta su futuro”.
Por Daniela Lorca
Dirección de Comunicación Estratégica