En la Parroquia Nuestra Señora de Lourdes de Viña del Mar, Mons. Jorge Patricio Vega Velasco svd., Obispo de Valparaíso celebró la Eucaristía en la que se inició la Fase Diocesana del Sínodo dedicado a la Sinodalidad que inició el Papa Francisco el pasado domingo 10 de octubre bajo el lema “Por una iglesia Sinodal: comunión, participación y misión”. En las demás parroquias y capillas de nuestra diócesis, también se realizaron momentos de oración por el inicio de este Sínodo.

En la Eucaristía estaban presentes el párroco Padre Luis Alfredo Parra Carvajal y el padre Yoiner Ordoñez Mazabel, ambos de la Congregación de los Padres Pasionistas, quienes también dieron gracias y celebraron los 300 años de su fundación.

 Al inicio de la Eucaristía se rezó al Espíritu Santo para que nos bendijera y nos guiara en este tiempo que estamos viviendo. Junto a ello, Mons. Jorge Patricio Vega, realizó una bendición especial con motivo del inicio de la Fase Diocesana del Sínodo dedicado a la Sinodalidad. Bendijo el agua, para posteriormente, asperjarla entre los presentes.

La Iglesia somos todos nosotros

Mons. Jorge Patricio Vega, inició su homilía saludando a los padres Pasionistas, quienes acompañan el caminar de la comunidad eclesial de la Parroquia Nuestra Señora de Lourdes de Viña del Mar. "Quiero saludarlos de forma especial, porque ellos como familia religiosa, el martes 19 de octubre, están de aniversario, celebran 300 años de su fundación".

Junto a ello resaltó que este día iniciamos un proceso muy interesante al que nos ha convocado el Papa Francisco, que es el Sínodo dedicado a la Sinodalidad. "Este Sínodo nos invita a mirarnos, a escucharnos. No lo podemos negar, en los últimos tiempos hemos tenido como comunidad eclesial, algunos problemas y que son bastantes, porque no hemos sabido escucharnos. No hemos sabido poner la mirada en el otro, no hemos sabido salir de nosotros mismos para ir al encuentro del otro, para ponernos en la perspectiva del otro”.

“Para revertir todo esto, es que el Papa nos ha convocado a un Sínodo con un tema bastante particular: la Sinodalidad, es decir, la escucha del otro. Quiere que primero nos escuchemos nosotros como Diócesis, como parroquia, como comunidad eclesial, comunidad particular, nuestros diferentes grupos, movimientos, nuestras diferentes espiritualidades. Escucharnos y al escucharnos levantar la mirada para mirar al otro, cómo está el otro, en qué está el otro”.

 Destacó la importancia de salir de nosotros mismos, dejar nuestros egoísmos para escuchar al que está en nuestro entorno. “Debemos comenzar a escucharnos. Seguramente, al comenzar a escucharnos, al mirarnos entre nosotros vamos a ir viendo cómo poder resolver los problemas que tenemos. Este Sínodo no es para que lo realicen solo los que están en un cargo de responsabilidad como el Papa, los cardenales, arzobispos, obispos. No, es para que todos trabajemos y que todos nos escuchemos y que todos aportemos. La Iglesia somos todos nosotros. Por eso al iniciar ese Sínodo, quiero invitarlos a todos a tener una participación activa. No tenemos que andar como que no entendemos lo que pasa, tenemos la oportunidad ahora de ocupar un lugar privilegiado en la reflexión que como Pueblo de Dios estamos realizando”.

“Este es un proceso, vamos a tener muchos momentos de encuentro. No se queden bajo la micro. Súbanse a la micro que es este Sínodo para juntos poder superar las dificultades”. Al término de la homilía, los presentes renovaron sus promesas bautismales. Al finalizar la Eucaristía, se rezó la oración por el Sínodo.

 La primera fase del Sínodo será de escucha y consulta del Pueblo de Dios en las Iglesias particulares que terminará en abril de 2022. Durante ese tiempo en nuestra diócesis se realizarán Asambleas Decanales y se finalizará con una Asamblea Diocesana.

Fuente: Obispado de Valparaíso