21.07.2020
A través del decreto de Rectoría con fecha del 21 de julio de 2010, se formalizó en la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV) la creación del postgrado académico de “Doctor en Didáctica de la Matemática” ofrecido por el Instituto de Matemáticas (IMA) de nuestra Casa de Estudios.
Diez años de quehacer ininterrumpido, posicionan actualmente al Doctorado en Didáctica de la Matemática PUCV en un lugar de reconocimiento en su ámbito disciplinario tanto en Chile como en América Latina.
La actual directora del programa, Diana Zakaryan, describió el importante momento que experimenta el Doctorado, enfocado en aportar a la Didáctica de la Matemática como uno de los principales polos de desarrollo disciplinario y de formación de capital avanzado en esta área a nivel sudamericano.
“Nuestra comunidad crece cada año, actualmente contamos con 23 graduados que han tenido una exitosa inserción laboral. Uno de los alcances de este Doctorado es que los concursos que abren las universidades requieren explícitamente a doctores en Didáctica de la Matemática, lo que hace unos años no ocurría. Asimismo, el programa reúne a 27 estudiantes que se encuentran en distintas etapas del desarrollo de sus investigaciones y en un futuro próximo se desempeñarán como especialistas en el área tanto en Chile como en sus respectivos países. Por otra parte, el programa presenta un destacado nivel de internacionalización, debido a los convenios suscritos con entidades internacionales a nivel institucional y a las redes de sus académicos, lo que favorece el intercambio de ideas y experiencias, así como la movilidad de docentes y estudiantes”, señaló.
UNA MIRADA RETROSPECTIVA
Respecto de los actuales logros del programa, la mirada retrospectiva es primordial y los investigadores que iniciaron el proyecto y pertenecen actualmente a su cuerpo académico recuerdan sus orígenes y motivaciones iniciales, basadas fundamentalmente en la premisa que la “Didáctica de la Matemática que se cultiva en el IMA es una disciplina experimental, provista de marcos teóricos explícitos”, indicó Arturo Mena, director del Doctorado durante el periodo 2011-2016. De igual forma, sobre los inicios del programa precisó que “teníamos un exitoso magíster en la especialidad y nos pareció importante para el país que se la cultivara al más alto nivel, para el avance de la disciplina y el mejoramiento y el disfrute de los aprendizajes en matemáticas”.
Una serie de hitos han marcado la trayectoria del programa doctoral, consolidando su propuesta de excelencia académica, proyectada en la constante cooperación con centros de estudio de renombre internacional y en un trabajo investigativo innovador realizado por sus profesores y graduados.
“Comenzamos adjudicándonos un proyecto MECESUP, que nos permitió aprovechar experiencias de otros doctorados, de varios centros importantes en el mundo. Nos propusimos desarrollarlo en colaboración con dos programas de indiscutido reconocimiento internacional. Ellos, que nos conocían, nos aceptaron; manteniendo hasta hoy los convenios con centros de prestigio internacional. Sin lugar a dudas, tener en las comisiones de los primeros seis exámenes de grado, participación de reconocidos especialistas de talla mundial, rubricando su calidad, es parte importante de nuestra historia. Otro hito es que acreditamos el programa en cuanto tuvimos egresados y lo hemos mantenido así. Somos referentes en áreas de investigación que cultivamos, teniendo alumnos y ex-alumnos presentando sus trabajos por el mundo y publicándolos. Asimismo, de vital importancia para nuestra comunidad y su historia es nuestro apoyo a instituciones y programas nacionales de Educación Matemática, y de alumnos de Pedagogía; y al desarrollo de la disciplina en media docena de países”, expresó el profesor Mena.
Además, los esfuerzos presentes del cuerpo académico del Doctorado continúan focalizados en su destacada formación de investigadores en el área, instituida en “el rigor disciplinario reconocido por pares en el ámbito internacional, considerando la necesaria apertura a nuevas teorías, teniendo como fin la colaboración con expertos e instituciones de oriente y occidente; y una disponibilidad permanente a abrir nuevos caminos”, complementó el profesor.
PROYECCIONES A FUTURO
En relación a la perspectiva que entregan estos 10 años de actividad, la directora del Doctorado comentó algunos alcances de importancia para el futuro sobre el programa. “En primer lugar, dada la reciente acreditación, tenemos la oportunidad y el tiempo para actualizar nuestros procesos, sistematizar y mejorar el flujo de la información. Las proyecciones en general apuntan a fortalecer nuestra comunidad, a partir de las reuniones académicas y el trabajo colaborativo con los graduados y otros doctorados en el área. Otra de las proyecciones que se está madurando es ampliar el impacto de nuestro quehacer hacia la sociedad y políticas públicas del país”, concluyó.
Más información del Doctorado en Didáctica de la Matemática en el siguiente link.
Por Alejandra García
Instituto de Matemáticas