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Pascua de Resurrección 2025

La Resurrección de Jesús desde la perspectiva del Pacto Educativo Global
Pbro. Lic. Daniel Forconesi

Hemos celebrado la solemnidad de la pascua de Resurrección del Señor. Sin lugar a duda, para los cristianos es la fiesta por excelencia, el recuerdo más alto que podemos tener del Señor Jesús. El dinamismo muerte-resurrección de Jesús ha tenido para sus discípulos unas consecuencias que trascienden el momento puntual de su historia y se proyectan hacia toda de la humanidad.

Por la Resurrección de Jesucristo han sido perdonados nuestros pecados y tenemos acceso pleno a Dios, lo cual se experimenta como un nuevo nacimiento, “¡Bendito sea Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo!

Por su gran misericordia, nos ha hecho nacer de nuevo mediante la resurrección de Jesucristo de entre los muertos, para que tengamos una esperanza viva…” (I Pe 1, 3); una nueva vida en Cristo, según el convencimiento del apóstol Pablo “si hemos muerto con Cristo, confiamos en que también viviremos con él” (Rm 6, 8). Escribiendo a los cristianos de Corinto manifestaba esta perspectiva de la Resurrección y su influencia en la vida de los discípulos con estas palabras: “El que vive en Cristo es una nueva criatura: lo antiguo ha desaparecido, un ser nuevo se ha hecho presente" (2 Cor 5, 17).

Toda la celebración de la Pascua pone de manifiesto una realidad novedosa en la vida humana, somos una nueva creatura, lo antiguo ha desaparecido, un nuevo ser ha emergido de las aguas del bautismo. 

Para nosotros, que caminamos en fe y esperanza, esta perspectiva de la Resurrección es una afirmación esencial sobre nuestra vida; pero corre el peligro que sea concebida solamente un “noúmeno” 1 , es decir solo un dato especulativo de la fe que no es capaz de alcanzar la realidad que vivimos cotidiana y ordinariamente.

El dinamismo de la Resurrección se concreta por medio de los discípulos del Señor, en la transformación de la realidad que le toca vivir. Por este motivo hay una estrecha conexión entre la celebración de la Pascua, en la perspectiva paulina que hemos descripto, y la asunción del Pacto Educativo Global, impulsado por el papa Francisco.

La convergencia entre Resurrección y Pacto Educativo se da en la búsqueda incansable de una nueva sociedad, de una nueva cultura; cambio que viene impulsado por esos dos grandes motores de la vida humana: la fe y la educación. Es en el objetivo en donde converge Resurrección y Pacto Educativo, la búsqueda de una “nueva solidaridad universal y una sociedad más acogedora” 2 . La invitación del papa Francisco a dialogar sobre el modo en el que estamos construyendo el futuro del planeta, no es otra iniciativa que la de recapitular todas las cosas en Cristo (en el decir del apóstol Pablo “reunir todas las cosas… en Cristo” 3 ) como fuente de plenitud y salvación para la humanidad, mediante una serie de pasos congruentes, consecutivos que se convierten en objetivos de fe y educativos que pueden gestar una nueva sociedad: “poner a la persona en el centro, escuchar a los jóvenes, promover a la mujer, responsabilizar a la familia, abrirse a la acogida, renovar la economía y la política, cuidar la casa común”.